EN ETIOPÍA | Mi anédota con una mujer Hamer

TEXTO: Gregorio Schepeler

 

Un grupo de amigos viajeros, hace mucho tiempo, decidimos ir desde Chile a Etiopía: un país ubicado en el Cuerno de África con más de 110 millones de habitantes -posiblemente el segundo país más poblado de ese continente después de Nigeria- con más de 80 etnias y 90 lenguas diferentes.

 

 

Poseedor de atractivos insospechados, nuestra visita a Etiopía nos sorprendió, no solo por su capital Adís Ababa -ubicada a 3.000 metros de altura, una de las más altas del mundo- sino por su capacidad de combinar, por un lado, su ancestral cultura cristiana en la zona norte del país, destacando las impresionantes iglesias monolíticas subterráneas de Lalibela, o los monasterios pintados en medio de los lagos; o su sagrada ciudad amurallada de Harar, la cuarta ciudad santa del Islam y lugar de peregrinación del mundo musulmán, especialmente el africano, que tiene su propia lengua, el harari; como por otro, toda su zona sur, donde conviven quizás algunas de las más genuinas y puras tribus del planeta.

 

 

A nivel turístico, Etiopía merece una especial atención:

Porque su gente es amable, de vestimenta colorida y sonriente. Porque posee 9 lugares declarados por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad, varios de los cuales se visitan con gran admiración. Porque en su Museo de Adís Ababa se encuentra el esqueleto de “Lucy”, que data de 3,5 millones de años. Porque este país, aunque ocupado algunos años por los italianos, nunca fue colonizado. Porque en sus tierras centrales nació el movimiento rastafari y el reggae. Porque, cuentan, fue el territorio en que habitó la Reina de Saba y de ahí salió a conocer al Rey Salomón. Porque se dice que, en algún lugar sacro, se encuentra el Arca de la Alianza y las Tablas de la Ley. Porque posee un alfabeto de más de 2.000 años. Porque allí están las tribus animistas en el Bajo Valle del Río Omo, quizás una de las más intactas del mundo. Porque están los cristianos ortodoxos en Lalibela y sus alrededores. Porque están los musulmanes en la santa ciudad de Harar. Porque en su Lago Tana, el cuarto en tamaño del continente, nace el Nilo Azul. Porque tiene los cocodrilos más grandes de África. Porque tiene un calendario distinto, basado en un sistema copto creado por los cristianos ortodoxos, y un horario propio. Porque tiene uno de los mejores cafés del mundo y su línea aérea es reconocida como las mejores del continente africano. Y ésta es mi historia… Habían pasado 12 años desde mi primera visita a Etiopía, cuando regresé.

 

 

En aquel entonces -en que existían mayores dificultades de desplazamiento, de alojamiento y de comunicación- yo viajé con mi libro turístico Bradt, recorriendo las diversas tribus que hay en las orillas y en los recónditos valles del río Omo, al sur del país. Un sinfín de grupos étnicos diferentes que, además de dialectos distintos, muestran especial decoración de sus cuerpos. Algunos se pintan las caras, otros trabajan con dedicación sus peinados, unos utilizan platos de diferentes tamaños en su labio inferior, muchos se hacen escarificaciones en la piel y así. Esos son, entre otros, los Konso, los Ari, los Arbore, los Mursi, los Turmi, y por supuesto los Hamer. Trasladarse de un grupo étnico a otro era difícil. No había turistas. Algunos son bastante agresivos. Pero igual, los visitamos y circulamos entre ellos.

 

 

Lo que yo no me hubiese imaginado es que en la tribu Hamer, la más numerosa del sur de Etiopía, yo conocería a una mujer con la que me reencontraría, sin planificarlo, más de una década después. Los Hamer ocupan tierras del Parque Nacional Mago, con zonas semi áridas. Cultivan el sorgo, el mijo, las calabazas. Poseen ovejas, cabras, vacas. Son un grupo étnico esbelto, con sensuales rasgos más finos. Viven en elementales casas de paja con muy pocos utensilios. Ellas se visten con cueros. Las solteras usan adornos de colores. Las casadas llevan unos pesados collares de fierro y un collar con una gran protuberancia de metal, si es la primera esposa. Se peinan con trenzas que cubren con barro color ocre y rojizo, y luego con grasa animal. Tanto hombres como mujeres decoran sus cuerpos con escarificaciones, y las mujeres lucen marcas de latigazos en sus espaldas, lo que les otorga especial status por su valentía.

 

 

Un día, revisando mis notas turísticas, un guía local se me acercó y me mostró la portada de la guía Bradt, en que aparecía una mujer de la tribu Hamer con un peinado de trenzas y tierra roja, y en sus brazos con un niño pequeño. Días después, ese mismo guía me dio la sorpresa y, en un pequeño asentamiento con precarias construcciones, apareció la misma mujer y su hijo. Nos saludamos y logramos una inexplicable comunicación, por lo que celebramos este encuentro con sonrisas y fotos. Días después nos iríamos rumbo al norte para comenzar el regreso a Chile.

 

 

Cuando planifiqué regresar a Etiopía 12 años después, llevé especiales regalos, incluyendo las antiguas fotos, ahora enmarcadas, por si encontraba a esa mujer y su hijo. Esta vez, viajé con un grupo de amigos a los que les conté la historia y nos propusimos encontrarla. Yo solo recordaba que era de la tribu Hamer, pero no con precisión donde vivía. A los pocos días, estando cerca de Turmi -en territorio de los Hamer- el guía que nos acompañaba llegó excitado, gritando: “La encontré. Podemos ir hoy a visitarla. Se llama Waleda”. Mi entusiasmo fue también el de todo el grupo y hasta su lugar fuimos con todos nuestros regalos. Ella, nos recibió contenta y muy sorprendida. De su hijo, ahora supe que era una preciosa muchacha. Junto a ellas tomamos café recién preparado en calabazas-tasas, que compartimos con gran alegría. Para mí fue una sorpresa que superó mi imaginación. Y en todos los que fuimos en aquel viaje, esa alegría se mantiene hasta hoy intacta, recordando a los Hamer, a Waleda y el haber podido sonreir con ella.

 

Habilidades

Publicado el

28 noviembre, 2020

33 Comentarios

  1. ISABEL ALLIENDE

    Genial relato, cuando recuerdo el encuentro todavía siento la alegría que experimentamos . Además creo que visitar Etiopía es una experiencia maravillosa y sorprendente.

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    • Germán

      Que bueno tener recuerdos de nuestro viaje Carmén

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  2. Carmen Schmitt

    De JUAN PABLO SILVA C.

    Gracias Carmen por compartir tan especiales historias

    Un abrazo

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  3. Alejandra Raffo

    Que emocionante experiencia Gregorio, he sabido de fotógrafos que frecuentan Etiopía, les llevan sus imágenes una vez que vuelven a visitar el país .
    También han creado fundaciones y un sin número de acciones para proteger estas culturas ancestrales.
    Gracias por el relato.

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  4. Paz Garcia

    Hermosa conexión que trasciende las palabras…pura presencia amorosa.

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  5. Sofía Vives

    Muy entretenido relato y buenísimas las fotos. Imagino la emoción de ese reencuentro.

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  6. Monica Moreno

    Maravillosa vivencia, al leerlo escuché tu voz Gregorio, tus relatos trasmiten tu esencia.
    Tu tienes una tremenda conexión con ellos. Gracias por compartir

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  7. Silvia Selowsky

    ¡Que hermosa historia y que fotografías tan bellas y que nos hacen apreciar cosmovisiones tan diferentes, únicas y originales. Tan necesario tener más y más atisbos de estas culturas ancestrales. Muchas gracias, Gregorio!!!! y a ti Carmencita por dar el espacio!!!

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  8. Alicia Larrain Chaux

    Tuve la enorme suerte y felicidad de ser parte de ese viaje maravilloso organizado por Gregorio y la Margarita Wills!
    El viaje más impresionante y fascinante!
    Fuertes contrastes, belleza y amabilidad espectaculares!
    Aprendimos y gozamos cada minuto de esa aventura increíble!
    Genial fue el encuentro con Waleda!!!
    Estoy en la foto grupal!

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  9. G. Dlefierro

    Gracias Carmen, un bello relato de una linda experienza. Muy bellas fotos que nos hacen conocer muchas cosas del pais a los que no hemos tenido la suerte de visitarlo.

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  10. Amparo Claro

    Fascinante experiencia que se agradece.
    Entenderse sin palabras.
    Imposible imaginar el mundo en que viven estos seres humanos.
    Percibimos su cultura, sus mitos, sus costumbres, sus intereses,
    desde fuera.

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  11. Paula Camus

    Buenísimo!!!
    Que bonita experiencia y que buenos recuerdos en este año tan extraño. Hace bien llenarse de energía positiva!!
    Felicitaciones!!!

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  12. M. del Carmen Noriega

    Maravilloso viaje, gracias por compartir tan lindas experiencias de este país con costumbres, tan lejanas a las nuestras. Muy entretenido e interesante. Felicitaciones al grupo de viajeros y a Carmen por compartir con sus seguidores.

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  13. Mercedes Hoces

    Qué vivencia más increible Gregorio, aún cuando ya conocía lo que habías vivido allá; ahora al leer el texto y ver las fotos, me emocioné y la «viví» nuevamente desde tu excelente relato.

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  14. Mariluz Hernandez

    Qué hermosa y entretenida historia. Con tantos datos que resumen lo que es ese fantástico país

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  15. marcelo sandoval

    Hermoso viaje y gran relato

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  16. Andrés Sanfuentes

    Gracias a la Margarita y Gregorio pudimos conocer ese maravilloso país y su gente, para mi el mejor viaje de mi vida. Aparte de todo lo dicho tuvimos el privilegio de conocer a los Hamer y a Meleda, de quien se sospecha es la madre de quien podría ser la hija de Gregorio, lo cual motivó la visita a esa tribu que buscó con tanto interés.

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  17. Carmen Schmitt

    De Iris Solórzano

    Gracias Carmen por compartir.
    Qué hermosura de historia.
    Cariños

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  18. María Teresa Gil

    Maravilloso relato. Amo Africa, he visitado
    numerosos países de este continente que es fascinante. Me deja muy entusiasmada por conocer Etiopia esta historia, sabemos tan poco de Africa….
    Muchas gracias por compartirla.

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  19. Eliana Rodillo

    Etiopia es fascinante, su gente, sus contrastes Fue un viaje maravilloso y la guinda de la torta fue vivir esra maravillosa historia. Muchas gracias Gregorio

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  20. José Miguel Ossandón

    Muy bueno, increíble.

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  21. Nancy Ortiz

    un relato fascinante y tentador para querer llegar por esas tierras.

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  22. Hernan Balbontin

    Extraordinario artículo y sorprendente historia….felicitaciones Carmen y Gregorio…

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  23. maria eliana christie

    gregorio: que lindo relato!! todavia me arrepiento de haberme saltado esa parte del viaje ya que nos encontramos unos dias despuesb en addis ababa

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  24. Carlos Alberto Urzua B

    Haber vivido esa experiencia de un encuentro casi imposible es imborrable y la emocion que sentimos, permanece viva hasta hoy.
    Los recorridos por rincones desconocidos del mundo realizados con Gregorio, con toda su espectacularidad y sorpresa no superan el valor de esta vivencia.

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  25. Jose Miguel Schmitt

    Tremendo articulo, que estimula el deseo de adentrarse en culturas tan diferentes a la nuestra. Bravisisimo!!!!!!!!!!!!!!!!!!

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  26. Jose Miguel Schmitt

    EXCELENTE

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  27. Gregorio Schepeler

    Muchas gracias CARMEN por tu entusiasmo y tu gran empuje en este BENDITOPLANETA.

    Ha sido un gran gusto poder escribir algo y que tu lo entregues a tantos curiosos del mundo, que añoramos llegar a lugares distintos y disfrutar de experiencias y vivencias.

    En estos tiempos que han sido más difíciles, debemos seguir soñando y traer al presente recuerdos que alimenten nuestras almas.

    Agradezco mucho a los lectores de BenditoPlaneta y a aquellos que comentan los artículos que se publican.

    Un gran abrazo y felicidades y esperanzas en estas fiestas de fin de año.

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  28. Carmen Schmitt

    Gregorio, todos formamos parte de un equipo de escritores que hemos gozado relatando y compartiendo nuestras experiencias de viaje. Sin osados como tú (porque mucha gente se inhibe de exponer por escrito su hermosa sensibilidad), no habríamos llegado lejos. Hoy dialogamos con más de 8.200 lectores, que cada semana reciben nuestros despachos. Gracias a ti, Gregorio, y a todas esas sabias personas que hemos conocido en el caminar por este Bendito Planeta…

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  29. Vicenta G.

    Magnifico relato Gregorio. Ojalá pudiera visitar Etiopia…gracias por compartir tu historia.

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  30. marta Ibaceta cardenas

    jamás se me hubiera ocurrido ir a Etiopía. Una sabe nada de estos lugares. Sí que siempre he intuido de solo mirar los rostros de personas como Waleda, la calidez que emana de mucha tribus y particularmente de los preciosos niños. Es ignorancia. sitúo en la UE, en LATAM y USA mi interés por adentrarme en sus usos y costumbre. la música, los bailes, sus artes manuales, me seducen. Creo que temo a lo desconocido. Seguramente quedaría transportada de conocer estos pueblos. Los felicito por su audacia y naturalmente , amor por Africa.

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  31. Ana María Sañudo

    Que emoción recordar Etiopía país maravilloso, alegre y muy diferente.
    Gregorio te felicito por tu relato muy interesante el recuento con la tribu 12 años después.

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  32. Olaya Pérez

    Gregorio, que interesante tu relato, que viaje más entretenido por mostrar una cultura tan distinta a nuestra vida y cultura occidental. Se me abre un mundo que parece de fantasía, pero es realidad y el relato de la experiencia de mi amigo Gregorio! Muchas gracias por compartirlo!

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