LUCAS REDONDO | Mi viaje a Hawaii con mi papá

  • NOTA: Este verano padre e hijo -quienes tienen una tradición de aventurarse juntos en distintos territorios en busca de experiencias fascinantes- hicieron un sueño realidad. Un viaje que llevó a Lucas a certificarse a sus 14 años como buzo recreativo advanced y dar sus primeros pasos en fotografía submarina en Maui. Para mí, ha sido la más difícil síntesis de muchas páginas escritas sobre un viaje irrepetible, donde las ballenas y su canto fueron parte del escenario. Aquí parte de su diario de viaje.

 

Texto: Lucas Redondo

 

«Partimos desde Chile a Peru en un viaje de 3 horas y 15 minutos. La Lola (mi abuela) nos había ido a dejar al aeropuerto, nos despedimos y cuando fuimos a esperar el vuelo que hacía escala en Lima, LATAM nos notificó que habíamos tenido un upgrade. No podía más con la felicidad! Mi papá me dijo que esto era la primera señal.

 

 

Dia 2: Llegamos a Los Angeles y nos quedamos una noche para no hacer el viaje a Maui tan cansador. Nuestra llegada fue buena, pero con mucho protocolo de aduana en Estados Unidos. Lo primero que hicimos fue ir a buscar el auto que habíamos arrendado y dar una vuelta para conocer algo de la ciudad, como Rodeo Drive, Beverly Hills y el letrero de Hollywood, entre otras cosas. De ahí a Redondo Beach, donde alojaríamos. Teníamos que hacerlo, era una cosa de apellido y había que comprar la polera.

 

 

Día 3: Básicamente en la mañana queríamos tomar un desayuno totalmente americano, con waffles y pancakes. Entonces nos subimos al auto y empezamos a buscar. Si no recuerdo mal, estuvimos como una hora y media buscando. No encontrábamos nada, nuestras esperanzas se estaban desvaneciendo, cuando a último momento vimos una cafetería llamada Eat at Joe’s, la cual nos salvó la vida. Estábamos muertos de hambre y esa cafetería era exactamente lo que estábamos buscando. Era perfecto. A la mañana siguiente, mi papá me despertó a las 4:00 porque teníamos que ir al aeropuerto a tomar nuestro vuelo a Hawaii! Entonces, cuando fuimos a hacer el check out del hotel, yo me puse a escribir lo que están leyendo ahora.

 

 

Al aeropuerto de Kuhului (que por cierto era muy bonito) nos fue a buscar Benjamín Iglesis, amigo de mi papá. Es buzo submarino y con él hacemos todas las inmersiones. Nos llevó por un camino costero muy bonito, mostrándonos partes de de Maui… Cuando llegamos al hotel yo aluciné. Había superado todas mis expectativas, era precioso, tenía piscina con palmeras, un bar al lado, bicis para llegar y usar, era excelente. Después de ordenar nuestra ropa en la pieza, almorzamos, agarramos las máscaras y nos fuimos a hacer snorkel a la playa. Tan solo yendo con una máscara ya puedes ver todo y más, con una visibilidad tremenda. Eso fue súper rico, además por la temperatura del agua, que era insuperable… Después fuimos a comprar cosas al supermercado, nos hicimos unos sándwiches en el hotel y nos fuimos a dormir.

 

 

Día 4: En la mañana nos dieron una orientación completa de todas las atracciones de la isla. Era asombroso la cantidad de cosas que había. En un recorrido increíble, llegamos hasta la Pacific Whale Foundation para ver ballenas. Al principio no se veía nada. De hecho la guía dijo que además de ser un whale watching, era un whale waiting. Pero, al paso de unos minutos, se asomó una cola y todos gritaron asombrados. Seguimos el viaje y las ballenas jorobadas seguían apareciendo por doquier. Eran muchas, y muchos gritos por parte de la gente. Las ballenas saltaban y aleteaban, salpicando un montón… Luego de las ballenas, fuimos al Acuario. El acuario, como todo en esta isla, era increíble. Tenia una variedad de cientos de peces y especies, tales como mantarraya, tiburón, tortuga, pez piedra, todo tipo de corales, cangrejos con caparazón, pez luna, unos atunes que eran del porte de un kia spark y mucho más en unos espacios preciosos, llenos de luces. También tenía secciones, como profundidad baja, profundidad media y profundidad alta, donde estaban los distintos peces. En la última sección, estaba la esfera 3D, donde te daban unos anteojos 3D y ponían una película sobre las ballenas que parecían que estaban a unos metros tuyo, eran totalmente reales. Algo también a destacar era la banda sonora, cosa que me gustó mucho. Lástima que ocupan tanta tecnología para tirar bombas y no la invierten en cosas como esto…

 

 

Día 5: Nos despertamos a las 5:00 de la mañana para ir a bucear. Teníamos que hacer una caminata de 30 minutos hasta el lugar donde salía el bote. Por suerte el equipo ya estaba listo desde ayer, nos subimos y nos fuimos… Me dieron un traje de 5 mm, lo cual era demasiado según yo. Hasta había gente con traje corto, cosa que en Chile te mueres de frío… Fuimos a Molokini, definición de precioso, una isla en forma de luna y, cuando nos metimos al agua, era mejor. Desde arriba se veía el fondo, y abajo tenía una temperatura de 23 grados, cuando en Chile varía por la región entre los 5-15 grados. También tenia una visibilidad de por lo menos 50-60 metros. El agua era azul, pero azul azul, totalmente alucinante, lleno de vida, cientos de distintas especies de pez, de las más bonitas, con colores fluorescentes y muy potentes. Aquí, además de ver especies tales como morenas, pepinos de mar, tiburones, tortugas, se ve todo tipo de corales que, por obvias razones, no se puede tocar ni sacar nada ya que es una reserva marina. Pero lo más increíble de todo, por lejos, por muy lejos, era que bajo el agua se escuchaba el canto de las ballenas. Imaginen lo potente que es su canto para escucharlo a kilómetros. Todavía no supero que el canto se escuchara. Era totalmente INCREÍBLE.

 

 

En el segundo buceo, fuimos a un lugar donde había un barco hundido. En el barco estaba el Benja Iglesis. El otro instructor era chileno. Se llamaba Cristobal y era súper buena onda. Cuando bajamos, era igual de increíble que en el buceo anterior… Me acordé que el Benja nos dijo que habían unos peces amarillos que se acercaban a nosotros, para que los siguiéramos y protegiéramos sus huevos de otros depredadores. Interesante dato… Esa tarde fuimos al acuario para hacer la inmersión con tiburones. Llegamos por una entrada trasera al acuario. Nos dieron una pequeña reseña sobre l estructura biológica de los tiburones. De hecho, los tiburones tienen en su nariz un órgano que les da tu pulsación cardiaca, y es tan agudo que les indica tu tamaño y si estás herido. Bastante impresionante… Bueno, nos metimos al acuario y estaba lleno de vida, mantarrayas, todo tipo de tiburones, peces globo, unos peces gigantes, más grandes que los tiburones. Esa experiencia fue buenísima. Pero la experiencia de bucear con decenas de tiburones al lado tuyo es inigualable.

 

 

Día 6: Como todos los dias nos levantamos a las 5:00 am. Yo como siempre con una flojera increíble. Bueno, nos vestimos, llevamos nuestras cosas e hicimos la caminata de 25 minutos para llegar al muelle donde está el bote… En esta sesión de inmersiones fuimos a dos partes: la primera era un gran acantilado de corales, súper bonito en la isla de Molokini. Está vez también pudimos escuchar las ballenas, súper bonito. Dentro de lo que vimos estaba el pez leon, el cual es muy venenoso. También una langosta australiana, que se veía gigante y tenía unos colores muy particulares. También vimos de nuevo tiburones de punta negra.

 

 

El segundo buceo fue en un lugar muy interesante. Eran dos lugares bajo el agua. El primero, un transporte anfibio de tropas de la Segunda Guerra Mundial. Era simplemente fantástico. Solo con verlo la historia se cuenta sola. Habían escombros y piezas mecánicas oxidadas. En el segundo lugar había un tanque también de la Segunda Guerra Mundial. Eso fue muuuuuy impresionante. Había un cardumen gigante de peces nadando alrededor, varias morenas entre las viejas y oxidadas orugas. Mi papá justo me había pasado la cámara. Entonces saqué mis propias fotos, fue algo muy bueno ya que me encantó sacar fotos y tengo unas muy buenas… En la tarde salimos a hacer snorkel. Vimos tortugas, grandes y chicas, también peces leon entre los corales.

 

 

Día 7: De nuevo nos levantamos a las 5:00 am y partimos al muelle para ir a bucear. Esta vez sin chalas. Teníamos los pies llenos de ampollas y con las chalas era doloroso caminar. Entonces fuimos a pata pelada. De nuevo a Molokini, pero a un lugar que parecía una escalera de corales. Teníamos la misma fauna, llenísimo de peces de todos los colores y con el canto de las ballenas de fondo, que nunca me canso de escuchar. Vimos langosta hawaiana que estaba enrollando algo que parecía un caparazón. Además de la langosta y todos los peces, dos tiburones, uno al lado del otro. Fuimos a donde creíamos que se habían ido y vimos en una cueva un tiburón durmiendo y como 6 tiburones chiquititos! Probablemente eran las crías que rondaban alrededor de la madre… El segundo buceo fue bastante mejor. Habían varios botes llenos de gente, alrededor de la zona de buceo. Calculo que habían 100 personas haciendo snorkel. Resulta que ahí había una mantarraya chica, muy curiosa, que jugueteaba con la gente… Bajamos y veíamos los pies de la gente, y la mantarraya estaba curiosa por nosotros. Se acercaba y se iba. Después hicimos un buceo poco profundo, entre 8 y 12 metros, lo que es muy bajo. Llegamos hasta un arrecife, donde habían 3 tortugas. No se asustaban ni nada. De hecho, se acercaban. No podíamos tocarlas. Estaba prohibido por ley. Pero como somos chilenos, las tocamos igual. Solo el caparazón. Seguimos luego hasta una cueva submarina, donde habían más tortugas todavía! Era todo un circuito de cuevas. En la más grande de las cuevas había un espacio de aire, donde subimos y hablamos un poco con mi papá. Seguimos viendo morenas y erizos recién creciendo. Se ponían azul neón, muy bonito… Después nos subimos al bote, llegamos a la costa muy cansados, pero felices.

 

 

Día 8: Nos levantamos a la misma hora de siempre, 5:00 am, para llegar a Molokini a las 8:00… Una de las mejores cosas fue que en el bote habían 5 personas, Un canadiense, un ruso, el Benja, mi papá y yo. El canadiense y el ruso fueron primero a bucear. Nosotros nos quedamos en el bote con Benja haciendo turnos. De las cosas interesantes que vi cuando bajamos fueron morenas, grandes y chicas, y una nadando, que eso es raro de ver. Un pulpo escondido en una roca. Lo sacudimos y se fue tirando tinta, fue gracioso. Y por último una especie de anguila, que no era la morena. Era más gorda y larga, pero con la cabeza más chica, muy raro.

 

 

Cuando ya estábamos todos arriba, no tuvimos idea de lo que se venía… De repente escuchamos un ruido muy fuerte. Nos dimos vuelta. Había una ballena jorobada adulta, volando por los aires. Nadie lo podía creer. Mi papá sacó el teléfono rápido y les sacó fotos de nuevo. En el segundo salto (Breach) fue I-N-C-R-E-I-B-L-E!!!!!!  Las ballenas estaban por todos lados, dando coletazos y aletazos más que nada. No volvieron a saltar y en un momento asomaron sus bocas y caras! Estaban tan cerca que decidimos ir a bucear rapidísimo para tratar de verlas. Lastima que no vimos nada, solo las escuchamos fuertísimo… En la vuelta del bote, estábamos literalmente rodeados por ballenas. Nunca había visto tantas ballenas y haciendo tantos movimientos. No hubo un segundo que no viéramos ballenas. Fue una experiencia inigualable… Ya en el muelle, cuando sacaron el bote, los ayudé a limpiar el bote con la manguera. Desde ese momento fui el nuevo empleado de Benja… Nos despedimos en un restaurante, donde me comí la mejor hamburguesa del mundo, la Ohana Burger. Esa hamburguesa tiene algo, un ingrediente especial en esa receta que las hace tan buenas. Me recuerda a las hamburguesas de Bob Esponja, jajajaja…

 

 

Día 9: Nos levantamos como siempre a las 5:00 am. Llegamos justo cuando el bote estaba en el agua. Estábamos solo con una pareja de Seattle, muy buena onda. El primer buceo lo hicimos en una parte de Molokini que nunca habíamos ido. Vimos cosas interesantes como camarones, peces globo y morenas. De hecho, yo estaba tranquilo nadando, cuando de repente mi papá me tira hacia arriba. Miro abajo y veo una morena nadando debajo de mi pies gigante, me cagué. Después la morena siguió como si nada… Camino al segundo buceo, vimos ballenas muy cerca, asomando el lomo y la cola. Pero, eso ya es cosa de todos los días. Fuimos a un lugar al lado de una playa llena de árboles, súper bonito; tenía como valles de corales y explanadas de arena, donde se formaban mini-montañas. Ahí encontramos de todo, tortugas, mantarrayas, tiburones, morenas, pulpo, pez globo, camarones y mucho más. Había un coral, en medio de toda la arena, apartado de todos, donde habían como 10 peces viviendo, 2 camarones, y una morena. Los camarones te limpiaban los dedos. Entonces yo metí el dedo para que me tocaran. Y de repente, en la cueva donde estaban escondidos, aparece la cabeza de la morena, y saqué el dedo al tiro. Eso pudo haber terminado sin un dedo. En la tarde el Benja nos vino a buscar porque íbamos a comer a su casa con su señora y su hija. Estuvimos horas conversando de todo, las historias de Benja, como llegó acá. Eso sí que fue entretenido.

 

 

Día 10: Estábamos con mucha pena, dejar Hawaii era terrible. Fuimos camino a nuestro último buceo, pensando en lo bien que lo habíamos pasado. En este buceo tenia que cumplir mi ultima prueba, si lograba el control de flotabilidad perfecto, iba a sacar licencia advance, lo cual era mi objetivo… En camino al segundo buceo, vimos unas ballenas al lado, pero al lado al lado, como a 5 metros del bote. Estábamos todos impresionados, estaban súper tranquilas, iban respirando y andando a nuestra misma velocidad. Cuando llegamos al segundo buceo, fuimos al barco hundido. Ese era mi último buceo, era una profunda pena?.  El buceo estuvo maravilloso, la mejor despedida posible. Ayer habíamos comprado una linterna, me la puse y fui a las partes más escondidas, profundas y oscuras del barco. Alumbrando con la linterna, me sentía como un verdadero explorador.

 

 

Seguimos hasta un auto hundido, no tenia carrocería, solo el manubrio y un par de ruedas. Nos sacamos unas fotos y de vuelta al barco vimos una hook turtle, la cual es bastante rara de ver. Es igual a la tortuga de mar, pero tiene la parte de arriba de la boca más larga. Era muy asustadiza, te acercabas y se iba nadando. Además de esa maravilla, vimos algo totalmente inesperado, una Hawaian Stingray, tan rara de ver que Benja, que tiene más de 14.000 buceos, no es broma, dijo que ha visto 3 en su vida! Era muy bonita. En vez de nadar con las dos aletas a la vez, lo hacía intercalado, flotando de forma muy tranquila, una maravilla… En el camino de vuelta vimos delfines! Nunca había visto delfines en vida real. Eran 3 delfines, 2 grandes y 1 chico. Nos quedamos cerca de ellos y ellos, cerca de nosotros, jugueteaban. Y ya cuando nos fuimos, ellos seguían detrás. Al rato se fueron… De regreso, ayudamos a lavar el bote y nos fuimos al hotel. De paso, fuimos a una tienda de buceo a comprar una bitácora de buceo, ya que teníamos pensado ir a Galapagos, y para eso se necesitan 40 buceos registrados y los teníamos… Saque mi licencia Advanced!!!! 30 metros!!!

 

 

Día 11: En camino al aeropuerto, estuve mirando por la ventana y recordando los momentos de este viaje. Incluso pasamos por el valle donde se graba la entrada de Jurassic Park (y no es broma).  En el avión me pasé la mayoría del tiempo escribiendo lo que tú estás leyendo ahora. Y cuando nos dijeron que estábamos próximos al aterrizaje, vi por la ventana y desperté a mi papá. Se veía toooooooda la ciudad, mucho más bonita de noche que de día, enorme. Hasta pasamos por arriba de San Francisco y vimos el Golden Gate y Alcatraz.

 

 

Día 12: Ufff, cómo describir la pena que teníamos al levantarnos, sabiendo que era el último día. Estábamos en Santa Mónica, por lo que fuimos a pasear por la Third Street, que era un paseo lleno de tiendas, cafés, restaurantes y otras cosas, muy bonito. Por la tarde nos fuimos al muelle de Santa Monica, y lo primero que vimos en el muelle fue Bubba Gump Shrimp Co., tal cual como el de Forest Gump. Nos comimos los mejores camarones del mundo, estaban exquisitos… Después de esta aventura recorrimos por segunda vez el muelle, y ya para despedirnos nos sacamos unas fotos con el letrero del muelle y Road 66. El día que tomamos el vuelo hicimos todos los procedimientos, abordamos y antes de darte cuenta, en un viaje de 10 horas ya estabas de vuelta en Chile.

 

 

Y cuando la Lola me vino a ver, así fue como me encontró…».

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Habilidades

Publicado el

4 febrero, 2020

27 Comentarios

  1. Queta

    Te felicito Luquita! Eres un gran narrador!!!

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  2. Eleonora Godoy Divin

    No hay mejor narración que la de un adolescente en el fascinante mundo submarino!!….
    me llega absolutamente encantador!, experiencia privilegiada justo para él!
    Felicitaciones Lucas, un gran beso acuático!

    Eleonora
    (la 1a profesion que quería tener era biología marina.!.)…

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    • Carmen Schmitt

      Gracias por tu feedback, Eleonora. Te aseguro que con Benja Iglesis en el mundo submarino alcanzarás todo lo que tú sueñas.

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  3. Andrea

    Felicitaciones Lucas!! Talentosísimo escritor y buzo

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  4. Eleonora

    Carmen querida!
    mis sueños están ahora muy lejos del mundo submarino!…
    creo que soy una especie olvidada de sirena que practica buceo espiritual…
    en el plano terrestre!

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  5. Pamela

    Te pasaste Lucas! Demasiado entretenida la historia y has superado a la Lola, no sabia que escribías Tan bien!!

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  6. Sylvia Behnke

    Me encantó la experiencia de Lucas. Muy entretenida y bien narrada. Felicitaciones !!

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  7. Anita Cuevas

    Lucas!!!!!! Que emocion leer tu viaje!!! Estuve viendo todo el rato tus fotos!!! Increible!!!
    Te felicito demasiado!! Sigue cumpliendo todos tus sueños!!
    Un abrazo gigante!!

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  8. Barbara Mayer

    Qué lindo viajar a través de tus ojos, LucasRed.

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  9. José Miguel Ossandón Correa

    Extraordinaria e inolvidable experiencia de conocimiento de la naturaleza para Lucas.
    Felicitaciones a él, a Pablo y a Carmen

    Responder
  10. Lucas Redondo

    Gracias a todos por sus comentarios!

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  11. Benja

    Hermoso, lo pasamos increíble, grande Lucas. Abrazo

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  12. Francisca Massanes

    Felicitaciones!! Gocé con tu relato imaginandome lo que viste y viviste. Preciosa experiencia.

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  13. Adriana

    Qué extraordinario reportaje Lucas! Escribes maravilloso y nos permitió conocer de manera muy entretenida algo muy desconocido para la mayoría de todos nosotros
    Felicitaciones!!!!

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  14. Mayette

    Me encanto el articulo… muy descriptivo y motivador, me podia imaginar muy bien los lugares y acompañar a Lucas en sus observaciones bajo el agua… genial!!!

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  15. Carmen Schmitt

    From: Eliana Burkhalter

    Amazing experience for Lucas. Pocos jóvenes tienen la oportunidad de un viaje tan espectacular. Gracias Carmencha por compartir y me muero de envidia por no haber tenido esta oportunidad cuando era una chiquilla!
    Abrazo para ti y otro para Lucas.

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  16. Chigue

    Jajajaj, acá leyéndote a las 5 de la mañana,
    Te felicito por tu lcarbet de buceo y la iniciativa de una bitácora de viaje con los tips para el viajero. Un abrazo.

    Responder
  17. Diego Schmitt

    ¡Pero qué increíble relato! Sentí que estaba leyendo una versión moderna de Veinte Mil Leguas de Viaje Submarino. Las ballenas voladoras, la mantaraya que se ve 1 vez en la vida y los vehículos hundidos bajo el mar suena como sacado de una novela fantástica.

    Felicidades por tu licencia advance. Y que sigas teniendo aventuras tan buenas como esta.

    Responder
  18. Sergio

    Gracias Carmencita por compartir esta aventura.

    Felicitaciones a Lucas por su narrativa y a su Papa por darle el privilegio de esa oportunidad,

    Maui es un paraíso inolvidable, … me hizo recordar una experiencia similar con mi hijo, hace ya mas de treinta años, no somos buceadores así es que lo nuestro fue Parasailing, igual el recuerdo queda para toda la vida.
    Saludos

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  19. Judith Arango

    Que fascinante leer todas las emociones de alguien que desborda pasión por el buceo! Maravilloso lo que describe ve y experimenta en el mundo submarino. Felicidades!

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  20. Gonzalo

    Lucas, de 1 a 100…… un 100. Fantastica narracion de tu aventura en el Planeta.

    Responder
  21. jRISI TEFARIKIS

    ME ENCANTO LA NARRACION DE ESE NIÑO INTELIGENTE, FRESCO, TRANSPARENTE QUE NOS SUMERGIO EN LAS AGUAS DESCONOCIDAS DE HAWAI Y CON TANTO TALENTO PARA ESCRIBIR Y TRANSMITIR TANTA ALEGRIA A LOS LEYENTES.
    aDORABLE LUCAS

    Responder
  22. Carmen Schmitt

    Mil gracias a todos por sus apoyadores y valiosos comentarios.
    Para Lucas ha sido un regalo insospechado que indudablemente será un tremendo estímulo para lo que la vida le depare por delante.

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  23. scubatlantis

    Sin duda un grandisimo viaje en familia, no hay nada como compartir esos momentos debajo del agua con tus hijos y amigos.
    Fantastico articulo!! me encanto su relato

    Responder
    • Carmen Schmitt

      Gracias, scubatlantis. Nos impresionas con tu mensaje desde Madrid. Verdaderamente el mundo es un pañuelo!

      Responder
  24. Myriam

    Extraordinario viaje Lucas. Te admiro por tu forma de relatar cada experiencia que viviste, a ratos, al leer, me sentía rodeada de aquel mundo submarino maravilloso.

    Gracias por compartir esos días tan lindos de tu vida.
    un gran abrazo!

    Responder

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