Enamorados de la Patagonia, Verónica Clarke y Heliodoro Hoces de la Guardia están ciertos por qué eligieron Puerto Natales, cautivados por cierto tipo de hoteles próximos al imán turístico que son las Torres del Paine: octava maravilla del mundo en el sur de Chile.
APPELGREN HOUSE
Para Yoyo Hoces, como lo llaman con cariño sus amigos, “el aumento del turismo en la Patagonia fue algo que vislumbramos cuando hace 5 años decidimos con mi señora vivir parte del año en la zona. Compramos unas tierras y levantamos Appelgren House, un hotel boutique de excelencia en Puerto Natales. Y es que la ciudad, cercana al Parque Nacional Torres del Paine, era también la parada lógica para realizar desde aquí un sinnúmero de excursiones fascinantes por sus alrededores”. La idea fue un éxito. Tanto, que hace un año Appelgren House duplicó su estructura. Hoy el hotel -ubicado en el llamado Camino 1 de Natales, a dos kilómetros del centro y emplazado a unos 50 metros de altura sobre el nivel del mar- cuenta con amplias habitaciones dobles, triples, suite de 50 m2 y todas con una espectacular vista al Seno de Ultima Esperanza.
Yoyo reconoce que el flujo de pasajeros más relevante lo constituyen extranjeros, quienes saben de antemano el atractivo de las Torres, debido en parte a la promoción turística que Chile ha realizado a nivel mundial. “Y aquí estamos, bajo nuestro lema, con un trato personalizado: Todos atendidos por sus propios dueños. ¿Por qué nos convertimos de capitalinos en patagones? Porque nos fascinó el contacto con esta geografía primitiva, indómita y salvaje. Queríamos también aportar a la zona un establecimiento de primerísimo nivel -en medio de una atmósfera cálida, colorida y luminosa- que hemos decorado con artesanía y memorabilia traída en numerosos viajes por el mundo. Reflejo de nuestro segundo lema: Appelgren House es su casa fuera de su casa”.
SIMPLE PATAGONIA
En opinión de Verónica Clarke, qué mejor que aprovechar el invierno o primavera -que es temporada baja y los hoteles están al alcance de los bolsillos- para permitirse una escapada, a fin de maravillarse con cerros nevados y paisajes que no se ven en verano. “Para mi, la belleza y comodidad del hotel boutique Simple Patagonia -una verdadera sorpresa en la zona- se transformó en el lugar donde pude disfrutar de extraordinarias vacaciones”. El hotel se encuentra a 5 kilómetos de Natales como un proyecto de la familia Gallardo Gysling, rememorando las antiguas construcciones de líneas simples y espacios amplios, propias de las estancias patagónicas chilenas. Sandra, quien es dentista de profesión, junto a Alvaro, ingeniero, dejaron atrás sus carreras para aventurarse en un proyecto que involucraría también a toda la familia. “El hotel por fuera parece un galpón. Pero, por dentro, sus ventanales con vistas maravillosas dejan a cualquier visitante con la boca abierta”.
Fue, cuenta Verónica, “lo que le ocurrió al millonario chino, Luo Hong, destacado fotógrafo que no solo llegó al Simple Patagonia con dos helicópteros para tomar imágenes especificas -a objeto de exhibirlas luego en su propia galeria de arte en China- sino que se deslumbró con el chupe de centolla que le ofreció el chef del hotel, Esteban Gallardo Gysling. Dueño de un restaurant con estrella Michelin en China, Luo Hong decidió invitar a Esteban a Beijing para que allá le enseñara a sus propios chefs”, gesto que los halagó. En su estructura, el Simple Patagonia cuenta con 15 habitaciones, todas de madera nativa con enormes ventanales que miran también al seno Ultima Esperanza. Distribuidas en dos niveles, cada habitación está decorada para el descanso. «Otra exquisitez, suma Verónica, es el desayuno buffet que no tiene horario límite”. Por lo que alojando aquí, “aprovechamos de visitar una vez más el Parque Torres del Paine, época en la cual pudimos ver a los infaltables guanacos, cientos de caiquenes y muchísimos flamencos”.
THE SINGULAR PATAGONIA
Muy próximo al Simple Patagonia, y a 5 kilómetros de Puerto Natales, está The Singular, hotel premiado como el mejor de Chile por Travellers´Choice 2017 y el único chileno en la lista de los Leading Hotels of the World. Aunque su puesta en marcha no fue para nada fácil. Sus inversionistas se demoraron 12 años en ponerlo en funciones, tras reacondicionar el viejo frigorífico Bories, de la antigua Sociedad Exploradora de Tierra del Fuego, donde se faenaban los corderos que se enviaban desde ahí a distintos lugares del mundo. Tras casi 60 años de operaciones había dejado de funcionar a fines del siglo XX y en su interior aún se conserva una colección privada de máquinas, motores y otros artefactos rescatados de la vieja planta, donde hoy se emplaza el hotel.
Quien lo convirtió en la espectacularidad que es hoy fue la oficina del arquitecto Pedro Kóvacic, el mismo de Appelgren House. Inaugurado en 2011, su sofisticación provocó un boom de hoteles y restaurantes a su alrededor. Aunque la gastronomía del restaurante de The Singular es tal excelencia que aunque usted no aloje, es un must ir, por lo menos, a tomarse un aperitivo. The Singular Patagonia fue declarado Monumento Nacional en 1996 por su importancia histórica, cultural, industrial y arquitectónica. Hoy es máximo orgullo para los descendientes de sus dos pioneros: John Mac Lean Frazer (1860-1940), escocés que llegó a la Patagonia en 1887, dedicando su vida a la ganadería; y de José Menéndez y Menéndez (1846-1918), de origen asturiano, accionista de la Sociedad Exploradora de Tierra del Fuego, desde sus inicios. Nada menos que una experiencia de lujo en lo que se conoce como “el fin del mundo”.
COMO LLEGAR
- Vuelos: Santiago/Punta Arenas vía Latam (http://www.latam.com), Sky (www.skyairline.com/) y SmartJet (https://jetsmart.com)
- Transporte terrestre: Desde el aeropuerto Punta Arenas, bus directo de 3 horas a Natales en Buses Fernández o Buses Sur. También arriendo de automóviles desde el mismo aeropuerto.
CONTACTO
- Appelgren House: appelgrenhouse.com
- Simple Patagonia: http://www.simplepatagonia.cl
- The Singular: https://thesingular.com/en/hotel/patagonia
Belleza!!!
Siempre me había preguntado cómo eran por dentro esos hoteles que están cerca de Torres de Paine. Se ven más grande y espaciosos de lo que aparentan (o por lo menos las fotos me dan esa sensación).
Si el chupe de centolla del sur ya es rico no me puedo imaginar lo rico que sería preparado profesionalmente en esos lugares.