Hace 50 años, el Arrayán era una localidad donde los santiaguinos iban a veranear. Quién diría que ese paisaje precordillerano precioso quedaría hoy “a la vuelta de la esquina”…

 

REFUGIO A MINUTOS DE SANTIAGO

 

El equipo de Comunicaciones de la Municipalidad de Lo Barnechea nos ayudó a develarlo más, con su flora y fauna única, residencia de artistas famosos, comida típica, trekking y cientos de sorpresas para quienes busquen desconectarse de la capital.

 

 

Dos caminos para acceder a esta precordillera,  dividida por el estero El Arrayán, a partir de la plaza San Enrique. Por el bloque montañoso izquierdo, el primer atractivo: “Doña Tina”, restaurante famoso por su comida chilena, atendido por su dueña y sus 7 hijos. Un poco más arriba, el tradicional “Hansel y Gretel” con comida y repostería alemana. Y más arriba, siempre por el Camino Refugios del Arrayán, la Pastelería “María Vila”, pequeño local pero con un amplio surtido de alimentos para llevar,donde la música clasica está siempre presente.

 

 

En tanto, por el bloque montañoso derecho: el Santuario de la Naturaleza, con senderismo, trekking y deporte para todo aficionado. Un destino outdoor imperdible, con el Sendero de las Cabras (que lleva a un mirador, al sendero Tropero Quebrada Maqui y a la Quebrada del Diablo, donde se practica montañismo, ciclismo, cabalgatas, pesca con mosca y motociclismo); los Baños de la Cal (donde los lugareños aprovechaban sus aguas con propiedades terapéuticas); la Ruta del Pochoco, otro trekking clásico (con senderos para principiantes y expertos en entrenamiento) hasta llegar a su cumbre de 1.800 mts. Sin olvidar el Observatorio Achaya para los amantes del Universo (donde se pueden recorrer las 3 cúpulas y su terraza de observación con telescopios de diferentes tamaños); y las Lagunas del Viento, consideradas el origen del estero. Entre sus vecinos, dos emprendimientos ejemplares.

 

DOÑA TINA

 

 

De 80 años, Agustina Gómez (más conocida como Doña Tina) es el alma del restaurante que cobijó a 800 personas cuando lanzó el libro sobre su propia historia. Su autor fue Don Francisco, Mario Kreutsberger, quien creyó en esta mujer que no tuvo educación, pero sí muchas ganas de surgir. De esto hace 40 años. “Bendiciones de Dios –recalca ella- porque éramos personas conscientes de lo que íbamos a hacer”. Si en 1973 comenzó a vender pan, en los 80 ya tenía restaurante. Junto a ella trabajan sus 7 hijos. Luis, el mayor, su administrador; Angélica, su única hija mujer, dueña de la cocina; y por ahí Martín, su hijo haitiano que ella adoptó hace 11 años. A su primer libro (“Recetas y secretos de Doña Tina”) siguió un segundo, también sobre cocina. Ahora planifica un tercero, sobre el final de la vida: “La psicóloga, Pilar Sordo, dijo que lo quería escribir. Pero, si ella no aparece, lo escribes tú”…

 

MARIA VILA

 

 

Hace 9 años, Hernán Navarrete y Verónica López Vila emprendieron “María Vila”, en lo que antes fue un sendero retirado de la zona urbana. Pero, hasta aquí hoy llega gente en búsqueda de empanadas por cientos. Porque además de sus platos preparados y su exquisita dulcería, gran parte de su fama radica en sus empanadas de horno. En un comienzo, ni siquiera tenían un letrero, hasta que la gente comenzó a preguntar. Después fue darse el dato. Y si bien Verónica es la dueña en la cocina, su marido -que también es violinista- ya prepara la ampliación de lo que será la segunda etapa: la puesta en marcha de lo que en otras latitudes se conoce como un “eco-café”, que combina la buena comida con la difusión cultural, y pequeños encuentros musicales con música selecta.

 

DATOS
  • Santuario de La Naturaleza. Camino El Cajón 21.000. A 15 minutos en auto o colectivo que se toma desde la misma Plaza San Enrique.
  • Piscina municipal: Camino El Bajo 17.300, lugar que disfrutan en verano niños de La Parva, el Colorado, Farellones, Corral Quemado y Lo Ermita con clases de natación en enero y febrero.
  • Centro de las Tradiciones de la comuna. Lo Barnechea 1200.